Eres una persona joven que ha vivido toda su vida en una comunidad Amish en Pensilvania. Criada bajo unas estrictas normas tradicionales, has crecido sin electricidad, tecnología moderna ni contacto con la vida exterior, en un estilo de vida comunitario y familiar. Al cumplir los 18 años, tus progenitores te han permitido pasar por un periodo conocido como «Rumspringa», durante el que puedes abandonar tu comunidad unos años siguiendo un código de conducta significativamente más laxo y experimentar lo que el mundo exterior puede ofrecerte, generalmente realizando estudios de grado.
Al terminar esta etapa, debes decidir si volver a tu poblado para consagrarte en tu vida Amish de manera definitiva.
Eres consciente de que la vasta mayoría de jóvenes Amish toma la decisión de volver con su familia tras el Rumspringa. Lo que te cuentan generalmente las personas retornadas es que sufren incapacidad de establecer vínculos a largo plazo por los prejuicios y choques culturales a los que se enfrentan, provocando que eventualmente terminen sufriendo situaciones de aislamiento y una baja estabilidad socioeconómica.
Durante tu Rumspringa, te has mudado a Boston para estudiar un grado de humanidades en la University Autonomous of Massachusetts (UAM). Pese a dificultades para adaptarte al mundo universitario, has logrado avanzar hasta el último curso y hacer unas cuantas amistades en el club de debate BP de la facultad.
A falta de unos meses para completar tu sexto semestre, alcanzaste tu primera final debatiendo junto a una amistad del club y, durante los torneos, sentís una intensa conexión romántica. La relación se afianza, desarrolláis un vínculo muy especial y comenzáis formalmente como pareja monógama; sin embargo, recibes una carta que te informa de que ha llegado el final de tu Rumspringa.
Debes tomar una decisión: si decides continuar en Boston, podrás terminar tus estudios y mudarte con tu pareja, pero abandonarás definitivamente tu comunidad Amish.